Piénsatelo antes de coger el coche

Caminar no solo es bueno para ti: también es beneficioso para el medio ambiente. Sin embargo, todos tenemos que utilizar los medios de transporte para ir al trabajo, visitar a familiares o amigos, viajar... Por eso es importante que elijamos opciones que contribuyan a reducir las emisiones de CO₂.

El sector del transporte causa aproximadamente una cuarta parte de las emisiones de gases de efecto invernadero de la UE. ¿Sabías que más de la mitad de las emisiones de CO₂ de los hogares de la UE proceden de actividades relacionadas con el transporte, como desplazarse en coche al trabajo o coger un avión para ir de vacaciones?

• Deja el coche en casa. Por cada litro de combustible que consume el motor, se liberan a la atmósfera más de 2 kg de CO₂. Eso quiere decir que el depósito de combustible de un vehículo medio vierte a la atmósfera... ¡más de 100 kg de CO₂!
• La bicicleta, el transporte público, el uso compartido del coche y los servicios de carsharing son opciones recomendables para tus desplazamientos. Por supuesto, caminar sigue siendo el modo de transporte más ecológico.
• Coge el tren. Un conductor que viaje solo en coche libera el triple de CO₂ por kilómetro que un pasajero de tren.
• Ten en cuenta las alternativas al avión. Los vuelos son la fuente de emisiones de CO₂ que más se está incrementando en el sector del transporte. Si solo vas a desplazarte unos cientos de kilómetros o menos, piensa en la posibilidad de ir en tren.

• Tu estilo de conducción determinará en gran medida el consumo del coche y sus emisiones de CO₂. Hay formas sencillas de mejorar el consumo de combustible como no frenar ni acelerar innecesariamente o comprobar la correcta presión de los neumáticos.
• Retira el portaequipajes si no vas a usarlo. Debido a la resistencia aerodinámica, los portaequipajes sin carga incrementan el consumo de combustible y las emisiones de CO₂ hasta un 10 %.
• ¿Te vas a comprar un coche nuevo? Lo ideal es que sea de bajo consumo. En la UE, los fabricantes están obligados a indicar, en los concesionarios y en la publicidad, las emisiones de CO₂ y el consumo de combustible de sus vehículos.

• Tienes la posibilidad de «compensar» las emisiones de CO₂ que generará tu viaje. Muchas empresas de viajes y otras organizaciones pueden calcular la huella de carbono de tu desplazamiento e invertir una cantidad equivalente en energías renovables o proyectos medioambientales, por poner un ejemplo.
• ¿Por qué no probar el ecoturismo? Tienes a tu disposición el catálogo de alojamiento turístico de la etiqueta ecológica de la UE.